¿Qué es la fijación?

Fijación Se refiere al proceso por el cual nuestros ojos mantienen una mirada estable en un punto u objetivo particular, permitiéndonos percibir información detallada desde esa ubicación específica. Implica el posicionamiento preciso del globo ocular y la alineación de la fóvea, que es el área de la retina responsable de la visión central nítida, con el objetivo.

Pasos involucrados en la fijación:

Sacádicas: Antes de que se produzca la fijación, los ojos se mueven rápidamente de un punto a otro con movimientos rápidos y sacádicos.

Aterrizaje: Una vez que los ojos identifican un objetivo, aterrizan cerca del punto deseado.

Ajustes finos: Se realizan pequeños movimientos correctivos para asegurar la colocación precisa de la fóvea en el objetivo. Esto implica la actividad coordinada de los músculos extraoculares.

Estabilización: Los ojos se estabilizan después del aterrizaje inicial y se realizan ajustes para mantener la fijación.

La fijación es crucial para diversas funciones visuales como:

- Agudeza visual: Permite la percepción de detalles finos al llevar la imagen del objetivo a la fóvea.

- Reconocimiento de objetos: Nos permite reconocer objetos comparando sus características con recuerdos visuales almacenados.

- Lectura: Facilita el procesamiento secuencial de palabras y letras durante la lectura realizando breves fijaciones en cada palabra.

- Exploración visual: Nos permite escanear el entorno y desviar nuestra atención hacia diferentes objetos.

La fijación también está sujeta a varios factores, tales como:

Propiedades de destino: El tamaño, la forma y el contraste afectan la facilidad y estabilidad de la fijación.

- Agudeza visual: Las personas con menor agudeza visual pueden experimentar dificultades para mantener la fijación.

- Atención y motivación: Los procesos cognitivos pueden influir en la duración y la estabilidad de la fijación.

- Trastornos neurológicos: Ciertas afecciones neurológicas, como el nistagmo o la apraxia oculomotora, pueden alterar el proceso de fijación.

En conclusión, la fijación es el proceso por el cual los ojos mantienen una mirada estable en un punto concreto, permitiendo una percepción clara de la información visual procedente de ese lugar. Implica movimientos oculares precisos y la alineación de la fóvea con el objetivo de interés y desempeña un papel vital en numerosas actividades visuales.