¿Cómo funciona la batería sin mantenimiento?

Una batería sin mantenimiento, también conocida como batería sellada de plomo-ácido (SLA), está diseñada para funcionar sin necesidad de mantenimiento regular, como agregar agua o verificar los niveles de electrolitos. Así es como funciona una batería sin mantenimiento:

1. Construcción sellada :A diferencia de las baterías tradicionales de plomo-ácido, las baterías que no requieren mantenimiento están completamente selladas. Esto significa que no tienen tapones ni respiraderos extraíbles, evitando la salida de humos o la necesidad de añadir agua.

2. Recombinación de gases :Las baterías sin mantenimiento utilizan una tecnología llamada "recombinación", donde los gases de oxígeno e hidrógeno producidos durante el proceso de carga se recombinan nuevamente en agua. Esto elimina la necesidad de agregar agua periódicamente.

3. Diseño de placa avanzado :Las placas dentro de una batería libre de mantenimiento están diseñadas para minimizar el desprendimiento de materiales activos. Esto reduce la resistencia interna y ayuda a prolongar la vida útil de la batería.

4. Tecnología AGM :Muchas baterías que no requieren mantenimiento utilizan la tecnología Absorbed Glass Mat (AGM), donde el electrolito se absorbe en un separador de fibra de vidrio entre las placas. Esto evita la estratificación del electrolito y mejora la resistencia de la batería a vibraciones y golpes.

5. Rejillas de aleación de calcio :Las rejillas que retienen los materiales activos en una batería sin mantenimiento están hechas de una aleación de calcio. Esto reduce la corrosión de las rejillas, lo que da como resultado una mayor duración de la batería y un mejor rendimiento.

6. Válvula de alivio de presión :Las baterías que no requieren mantenimiento tienen una válvula de alivio de presión incorporada. En caso de sobrecarga o acumulación de presión interna, esta válvula se abre para liberar el exceso de presión, evitando que la batería explote.

7. Baja autodescarga :Las baterías sin mantenimiento tienen una baja tasa de autodescarga, lo que significa que pierden menos carga cuando no están en uso en comparación con las baterías tradicionales de plomo-ácido. Esto los hace ideales para aplicaciones de almacenamiento a largo plazo.

En general, las baterías sin mantenimiento están diseñadas para funcionar sin complicaciones y requieren un mantenimiento mínimo durante toda su vida útil. Se utilizan comúnmente en diversas aplicaciones, incluidos automóviles, motocicletas, vehículos deportivos eléctricos, sistemas solares y sistemas de energía de respaldo.