Cómo construir un nanobot
La nanotecnología ha dado grandes pasos en los últimos años, cerrando la brecha entre la ciencia ficción y la realidad. En el proceso, el campo ha abierto la puerta a nuevas e interesantes posibilidades, incluidos los nanobots, que podrían ayudar a los científicos en la administración de fármacos, la eliminación de patógenos o el autoensamblaje microscópico.
Paso 1
Encuentre un laboratorio de investigación académica de renombre. Los nanobots no se pueden observar, y mucho menos crear, en ausencia de una sala limpia y maquinaria de deposición sofisticada. Si no eres profesor, contacta a aquellas personas que se dedican a la investigación en las áreas específicas que te interesa estudiar. Es posible que pueda trabajar como asistente de investigación y utilizar las instalaciones de investigación .
Paso 2
Aprenda sobre el autoensamblaje molecular y atómico. Los verdaderos nanobots no dependen de la electrónica, que no está en la escala de longitud nanométrica. En su lugar, se basan en los enlaces químicos naturales entre los átomos y solo se pueden formar en configuraciones muy específicas.
Paso 3
Piense en las aplicaciones. ¿Qué hará tu nanobot? Después de considerar la aplicación potencial, investigue todas las estructuras y superficies relacionadas para conocer las compatibilidades, los conflictos, las características de unión, las propiedades de los materiales y las respuestas de los materiales a diversos estímulos, como la luz y las ondas electromagnéticas. El objetivo debe ser explotar estas propiedades con estructuras autoensamblables adecuadas. Por ejemplo, si estuviera construyendo un nanobot que necesita adherirse a las células para matarlas, el primer paso sería preguntar a qué sustancias químicas es susceptible la célula. El nanobot probablemente presentaría este químico como una parte importante de su composición.
Paso 4
Una de las tareas más difíciles a nanoescala es la locomoción. Su nanobot necesita alguna forma de moverse con energía limitada. La fuerza impulsora podría ser un gradiente químico, un movimiento aleatorio o una potencia electrónica. Considere los diversos métodos y decida cuál se adapta mejor a los requisitos de energía y aplicaciones de su nanobot.