Las ventajas del protocolo de transferencia de hipertexto

El protocolo de transferencia de hipertexto, mejor conocido por millones de internautas como HTTP, fue inventado en 1990 por Tim Berners-Lee en los laboratorios del CERN en Ginebra, Suiza. Hoy en día, es la base de la World Wide Web y del lenguaje de marcado de hipertexto o HTML. Se desarrollaron tres versiones de HTTP:0.9, 1.0 y 1.1. Tanto 1.0 como 1.1 son de uso común en la actualidad.

Identificación

HTML estaba destinado a ser rápido y ligero. La velocidad de entrega se habilita mediante la creación de una notificación de tipo de archivo en el encabezado de los datos que se transfieren, conocido como tipo MIME. Esto permite que la aplicación receptora abra rápidamente el archivo entrante sin tener que preguntarle al remitente qué aplicación debe usarse para leer o ver el contenido del archivo.

Especialización

Una página web contiene elementos mixtos, como texto e imágenes. Cada elemento requiere una cantidad diferente de recursos para almacenar y descargar. HTTP permite múltiples conexiones para descargar elementos separados al mismo tiempo, acelerando así la transmisión. A cada elemento se le asigna su propio tipo de archivo particular y, por lo tanto, la computadora receptora puede manejarlo de manera más rápida y eficiente.

Direccionamiento

El esquema de direccionamiento utilizado por HTTP también fue un avance revolucionario. Cuando había que dirigirse a los ordenadores mediante una dirección IP que constaba de una serie de números, al público le resultaba difícil interactuar con Internet. La asignación de direcciones IP a nombres fácilmente reconocibles hizo que la World Wide Web fuera comercialmente viable.

Flexibilidad

Con la notificación del tipo de archivo que precede a la transmisión de datos, la aplicación receptora tiene la opción de descargar rápidamente extensiones o complementos si se necesitan capacidades adicionales para mostrar los datos. Estos complementos incluyen reproductores Flash y lectores de documentos PDF.

Seguridad

HTTP 1.0 descarga cada archivo a través de una conexión independiente y luego cierra la conexión. Esto reduce el riesgo de intercepción durante la transmisión, ya que la conexión no persiste más allá de la transferencia de un solo elemento de una página Web. El Protocolo seguro de transferencia de hipertexto (HTTPS) cifra el intercambio HTTP para agregar más seguridad.

Facilidad de programación

HTTP está codificado en texto sin formato y, por lo tanto, es más fácil de seguir e implementar que los protocolos que utilizan códigos que requieren búsquedas. Los datos se formatean en líneas de texto y no como cadenas de variables o campos.

Capacidades de búsqueda

Aunque HTTP es un protocolo de mensajería simple, incluye la capacidad de buscar en una base de datos con una sola solicitud. Esto permite utilizar el protocolo para realizar búsquedas SQL y devolver resultados convenientemente formateados en un documento HTML.

Conexiones persistentes

Un inconveniente menor de HTTP es la necesidad de crear varias conexiones para transmitir una página web típica, lo que provoca una sobrecarga administrativa. HTTP 1.1 tiene la capacidad de mantener una conexión abierta para varias solicitudes. Además, se agregó el concepto de "canalización", lo que permite enviar muchas solicitudes a la computadora receptora antes de que se atienda la primera solicitud. Estas dos medidas aceleran el tiempo de respuesta para entregar una página web.