¿Por qué las galaxias se dividen en tres tipos principales?

Edwin Hubble, un destacado astrónomo, ideó un sistema integral de clasificación de galaxias conocido como secuencia de Hubble. Según su apariencia visual y características estructurales, este sistema clasifica las galaxias en tres tipos principales:

1. Galaxias elípticas :Caracterizadas por su forma suave, casi esférica o elíptica, las galaxias elípticas muestran un perfil de luminosidad constante desde su centro hasta sus bordes exteriores. La mayoría de las estrellas de las galaxias elípticas son enanas rojas y viejas, lo que da como resultado una apariencia general rojiza. Los ejemplos incluyen M87 (la galaxia central del Cúmulo de Virgo) y la galaxia elíptica gigante M608.

2. Galaxias espirales :Se reconocen por sus característicos brazos espirales que salen de un centro o núcleo brillante. Los brazos espirales suelen estar formados por estrellas más jóvenes y más calientes, que producen un tono más azul. El gas, el polvo y la formación de estrellas a menudo se concentran dentro de los brazos espirales. Ejemplos destacados son la cercana galaxia de Andrómeda (M31) y nuestra propia galaxia, la Vía Láctea, que también es una galaxia espiral.

3. Galaxias irregulares :A diferencia de las galaxias elípticas y espirales, las galaxias irregulares carecen de una estructura bien definida. Exhiben una apariencia errática y caótica sin simetría perceptible ni forma distintiva. Como su nombre lo indica, tienen una forma bastante irregular. Las galaxias irregulares contienen principalmente estrellas más jóvenes que contribuyen a su coloración azul. Dos ejemplos comunes son la cercana Pequeña Nube de Magallanes y la galaxia Wolf-Lundmark-Melotte (WLM).

Es esencial señalar que la clasificación de Hubble no siempre produce categorías distintas. Algunas galaxias muestran características intermedias, pasando de tipos como galaxias espirales y elípticas o galaxias espirales e irregulares. Estas galaxias pueden poseer propiedades comunes a múltiples tipos y podrían justificar subdivisiones adicionales o clasificaciones híbridas en estudios más detallados.